
Puedes atiborrarte de comida y aún así estar en forma —
Se espera que los turistas se atiborren de platillos locales y postres, y también que caminen todo el dia para quemar esas calorías.

Está bien revelar tu lista de favoritos de los éxitos de los ochenta —
En casa acumulan polvo, escondidos en el fondo de un armario por miedo a que los descubran. Cuando viajas, tu compilación Now That´s What I Call Music 3 (Ahora esto es a lo que llamo música) se convierte en el alma de la fiesta retro.

Es viernes, todos los días —
No es de preguntarse ¿por qué?, sino, ¿por qué no?

Puedes liberar tus pies —
Los turistas no están atados a opresivos mocasines o tacones. Tus pies por fin pueden ser libres.

Es siempre más barato —
Bueno, te cuesta unos cuantos cientos de dólares llegar hasta aquí, pero de alguna manera, se siente como si valiera la pena cuando puedes llevar a casa grandes comidas por 2 dólares y bisutería exagerada por un dólar.

De repente tienes tiempo para leer —
Ese libro que ha estado acumulando polvo en tu mesita de noche, al fin lo podrás abrir. Tienes todo el tiempo del mundo para leer mientras estás volando, estirado en la playa o tumbado en una colina con césped.

Ni siquiera la lluvia puede deteriorar tu humor —
Lluvia, nieve o sol, es una oportunidad más para una foto interesante.

No estás en el trabajo —
No puedes explicarlo, pero esa gigante ballena azul inflable estaba pidiendo a gritos que la compraras. Intenta hacer eso cuando estés de vuelta en casa en tu hora del almuerzo.

Masajes de pies interminables —
Un masaje de pies decente en el sureste asiático puede ser tan barato como 5 dólares la hora. Así qué no es extraño hacerte tres masajes en un día; es económico.

Está bien parecer... un turista —
No hay razón para verte presentable. Los pantalones pueden ser feos, pero son cómodos y perfectos para el senderismo en sitios cálidos.

Supera lo que tus amigos están haciendo en casa —
Montar un elefante en el caótico tráfico en la India puede ser muy estresante, pero sigue siendo mejor que el metro.

Aprendes a través de la experiencia —
National Geographic puede tener imágenes e historias impresionantes de la gente de Cachemira en la cordillera del Himalaya. Pero nada supera realmente caminar por uno de los mejores destinos de esquí en Asia.

Las "horas felices" valen la pena —
Viajar significa descubrir finalmente la "Hora Feliz" a una hora en que beber es aceptable.

Puedes probar comida que solamente habías visto en la televisión —
Balut -embrión de pato hervido- es una de esas delicadezas locales que te hace encogerte de hombros. Pero en el espíritu de viajar y darle alas a la curiosidad, probar uno es obligatorio.

Se espera que te tomes fotografías con poses ridículas —
Podrían ser necesarias 50 tomas para capturar el momento perfecto en el aire, pero tomarse fotos saltando es el derecho de un turista, al igual que simular sujetar la Torre de Pisa y poner la yema del dedo sobre la Torre Eiffel.

Señalar es lo más cerca que llegas a cocinar —
Cuando el lenguaje oral falla, señala. Nunca antes "cocinar" ha sido tan placentero.

Puedes relacionarte con otras personas, y luego librarte de ellas —
Amistades de toda la vida a veces se hacen en las playas, bares y discotecas. Otras veces, un día de compartir tu historia de vida es suficiente.

Las postales muestran que piensas en los demás —
Mientras tus amigos revisan tus fotos de Facebook provocadoras de celos, una rápida postal es todo lo que se necesita para mantenerte fuera de sus listas negras.

Estar bronceado es mejor que no estarlo —
Mientras tus amigos revisan tus fotos de Facebook provocadoras de celos, una rápida postal es todo lo que se necesita para mantenerte fuera de sus listas negras.

Las experiencias son invaluables —
Mientras tus amigos revisan tus fotos de Facebook provocadoras de celos, una rápida postal es todo lo que se necesita para mantenerte fuera de sus listas negras.